Después de que el hombre que cometió el delito fuera capturado por el público, que se tomó la justicia por su mano, el ladrón se resintió de la paliza e incluso empezó a mendigar. Los casos de linchamiento siguen aumentando vertiginosamente. Esto se debe en parte a la ausencia de autoridades, que no pueden llegar a tiempo a la escena del crimen. Por ello, la gente decide atrapar a los delincuentes, en su mayoría ladrones, para darles su merecido.
Este fue el caso de la ciudadanía en Cali, que cansada de la inseguridad en el barrio Salomia, atrapó a un ladrón que intentaba robarle el celular a un joven. Al hacerlo, el ladrón intentó amedrentar a su víctima con un cuchillo. Cuando el delincuente estaba a punto de cometer el robo, los ciudadanos consiguieron detenerle y le atacaron con la llamada “terapia del puño”. Sin embargo, el sujeto no se arrepintió sino que se ofendió.
De acuerdo con la cuenta de Twitter “Cali Ok Noticias”, luego de robarle un celular a un joven, el sujeto intentó huir pero fue aprehendido por miembros de la misma comunidad de la zona. Las personas tomaron la justicia por sus propias manos y se abalanzaron sobre el delincuente con golpes e insultos. Sin embargo, el ladrón se sintió ofendido por la situación y se comportó de forma desafiante.