La reina Letizia ha renunciado a su papel de figura principal en estos momentos cruciales del entrenamiento y preparación de su hija para el trono. Tras un período durante el cual las princesas más jóvenes estuvieron notablemente ausentes de los eventos públicos, las dos princesas han vuelto a asumir un papel más destacado en las actividades de la familia real.
La semana pasada, durante los actos de conmemoración del décimo aniversario de la proclamación del Rey Felipe, Leonor y Sofía tuvieron papeles destacados. Según fuentes del Palacio de la Zarzuela, la reina Letizia decidió dar un paso al costado para permitir que sus hijas asumieran el papel de protagonistas.
Este nuevo giro en la presencia pública de la familia real se acentuará aún más en los próximos días. El viernes siguiente, la reina consorte no acompañará a la princesa Leonor a un acto militar, lo que le permitirá asumir el importante papel de futura jefa de las Fuerzas Armadas.
Asimismo, dentro de unas semanas, la princesa Leonor emprenderá su primera excursión oficial al extranjero, a Portugal, sin la compañía de sus padres. Aunque la asturiana no estará presente físicamente en estos actos, supervisa todos los detalles para que todo transcurra sobre la marcha.
Esta estrategia de la reina Letizia indica su clara intención de preparar a sus hijas, especialmente a su heredera Leonor, para un papel público cada vez más significativo en su camino hacia el trono. Letizia es consciente de que Leonor debe coger experiencia y confianza de forma independiente.
Aunque la ausencia de Leonor y Sofía en los últimos meses ha generado algunas críticas, Letizia ha demostrado una clara apuesta por que sus hijas asuman un papel cada vez más destacado. Este nuevo acontecimiento transmite una clara indicación de la identidad del futuro sucesor al trono.