El pasado 21 de agosto, una violenta tormenta azotó la Zona Metropolitana del Valle de México, provocando graves inundaciones y daños en diversas zonas. Un incidente particularmente notable ocurrió en Six Flags México, un parque de diversiones en Tlalpan, conocido como uno de los principales destinos de entretenimiento familiar en la Ciudad de México. A pesar de las alertas meteorológicas, el parque permaneció abierto y estuvo repleto de visitantes aprovechando los últimos días de vacaciones de verano.
Por la tarde, la tormenta se intensificó, trayendo fuertes lluvias y vientos, complicando el tránsito en varias zonas de la ciudad. En medio de estas difíciles circunstancias, un grupo de más de 30 personas en la atracción “Super Girl Sky Flight” enfrentó un momento tenso cuando el paseo se detuvo de repente, dejándolos suspendidos a más de 70 metros en el aire.
El personal del parque, comprometido con garantizar la seguridad de sus visitantes, siguió de inmediato los protocolos de seguridad y detuvo la atracción, a pesar de las condiciones climáticas extremas, para evitar posibles riesgos. Estas medidas de seguridad, diseñadas para proteger a los visitantes en caso de situaciones peligrosas como fuertes lluvias o terremotos, se implementaron rápidamente. Si bien dejaron a las personas en la atracción suspendidas en el aire durante unos 10 minutos, fue una precaución necesaria para garantizar su seguridad.