Aquí te explicamos por qué no debes ir al baño al despertarte por la noche

El siguiente discurso explicará la razón detrás de abstenerse de ir al baño al despertar durante las horas nocturnas.

Este artículo, escrito por un especialista del sueño, ofrece orientación sobre el comportamiento adecuado en caso de despertarse por la noche.

La mayoría de las personas tienen una variedad de comportamientos contraproducentes, que finalmente conducen al insomnio.

En medio del descanso nocturno, uno puede despertarse abruptamente del sueño y encontrarse con un estado de alerta despierto. Aunque el cuerpo todavía puede estar en reposo, no siempre es fácil sucumbir al sueño una vez más. Esta situación es demasiado familiar para muchas personas. Se ofrecen las siguientes recomendaciones para su consideración:

Sin embargo, si la necesidad de dormir resulta abrumadora, es inútil intentar resistirse. Sin embargo, es esencial tener en cuenta que ir al baño “ya que de todos modos no duermo” es un error de juicio importante, ya que casi con certeza resultará en dificultades para volver a dormir.

Incluso el simple hecho de levantarse y sentarse en la cama puede aumentar la frecuencia cardíaca en comparación con el estado de reposo durante el sueño (aproximadamente 60 pulsaciones por minuto).

Además, el Dr. Michael Breus, especialista en sueño, ha observado que cuando uno se levanta de la cama y se traslada a otra habitación, la frecuencia cardíaca se acelera aún más rápidamente.

Solo después de esto, la frecuencia cardíaca puede comenzar a disminuir, volviendo a su estado anterior al sueño. Este fenómeno contribuye a los desafíos que enfrentan las personas cuando intentan volver a entrar en el estado de sueño.

Es aconsejable evitar mirar la hora.

Además, el Dr. Breus recomienda que, independientemente de las circunstancias, se haga un intento de relajarse y desconectarse de la actividad mental. Es imperativo abstenerse de mirar la hora o responder llamadas, ya que muchas personas realizan instintivamente estas acciones inmediatamente después de abrir los ojos.

También se debe evitar contar las horas hasta que uno se despierte.

Es imperativo reconocer que muchas personas tienen un miedo irracional a no dormir lo suficiente. Por lo tanto, al despertarse durante las horas nocturnas, comienzan a controlar meticulosamente el tiempo que les queda hasta que suene la alarma, impidiendo así que puedan volver a dormir.

La respuesta recomendada a esta situación es cerrar los ojos, darse vuelta e intentar silenciar los pensamientos, facilitando así la recuperación del sueño.